Información
- Salón de actos de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando
- Alcalá 13, Madrid
- Martes 20 de diciembre, 19:30 horas
- Entrada libre y gratuita hasta completar aforo
Organizadores
Concierto de homenaje a Enrique Granados, interpretado por la mezzosoprano Marta Infante y el pianista Jorge Robaina, organizado conjuntamente por el Ayuntamiento de Lleida y la Real Academia.
Marta Infante mezzosoprano
Jorge Robaina piano
Programa
Enrique Granados (1867-1916)
1ª parte
Canciones amatorias
- Mañanica era
- Lloraba la niña
Piano solo
- Valses poéticos
Canciones catalanas
- Elegía eterna
- Cançó de gener
- L’ocell profeta
- La boira
2ª parte
Piano solo
- Allegro de concierto
Tonadillas en estilo antiguo
- Amor y odio
- El majo tímido
- El mirar de la maja
- El tralalá y el punteado
- La maja dolorosa I ( Oh! muerte cruel)
- La maja dolorosa II (Pensé que yo sabría)
- La maja dolorosa III (De aquel majo amante)
- La maja de Goya
- Callejeo
- El majo discreto
En el Canal de la Mancha, el 24 de marzo de 1916, un submarino alemán torpedeó el barco (el Sussex) en el que viajaban el compositor Enrique Granados y su esposa, quienes perecieron en el naufragio. Durante el año que ahora llega a su fin, se ha conmemorado el centenario del absurdo y trágico suceso que acabó con la vida del gran compositor y pianista catalán (ilerdense) cuando regresaba del exitoso estreno en Nueva York de su ópera Goyescas. Al morir, Granados iba a cumplir los cuarenta y nueve años de edad, pues había nacido en julio de 1867, lo que quiere decir que en el inmediato 2017 se cumplirá el sesquicentenario de su nacimiento. Pues bien, entre las dos efemérides, la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando acoge este concierto promovido por el Excmo. Ayuntamiento de Lleida en recuerdo de su ilustre hijo.
Enrique Granados fue uno de los grandes compositores-pianistas europeos que prolongaron, en los finales del siglo XIX y primeras décadas del XX, la figura de los Chopin, Schumann o Liszt, prototipos de compositor-pianista en el primer tramo del Romanticismo. En el concierto de hoy tenemos una perfecta muestra de este concepto: los Valses poéticos, escritos hacia 1887 y dedicados al otro gran pianista catalán, Joaquín Malats. Son una sucesión de nueve miniaturas pianísticas: un Vivace molto en compás binario, a modo de introducción u obertura, los siete valses propiamente dichos, y un Presto final que liga sin solución de continuidad con el último de los valses, a modo de coda, y en el curso del cual se repite el material del Vals nº 1, Melódico, para dar unidad y sentido cíclico a la composición. El planteamiento formal e instrumental de estas piezas, así como el propio título, remiten con fuerza al piano de Chopin, aunque seguramente la sensibilidad de Granados casaba mejor aún con el cosmos fantástico y poemático del piano de Schumann.
En esta sesión escucharemos otra obra de Granados para piano solo: el Allegro de concierto que compuso en 1903 para optar a un concurso de composición convocado por el Conservatorio de Madrid. Es una página virtuosística, como corresponde a los fines perseguidos por la convocatoria del concurso, ya que el Conservatorio madrileño –que regía Tomás Bretón- quería una pieza apta para medir la capacidad pianística de los aspirantes al premio fin de carrera de Piano. A finales de enero de 1904 se falló el concurso en favor de Granados, siendo el joven Manuel de Falla el más ilustre "derrotado" en la prueba. Si alguna obra de Granados remite al pianismo de Liszt como modelo, sería este brillante y rapsódico Allegro de concierto que combina virtuosismo instrumental e inspiración a partes iguales.
Pero nuestro concierto va a constituir sobre todo una amplia muestra de la música vocal del maestro Granados, de sus hermosas canciones que aquí se nos presentan en tres bloques bien diferenciados. Uno, el de Canciones catalanas, con textos de origen popular (La boira, Cançó de gener), más la Elegía eterna sobre versos de Apel.les Mestres y L’ocell profeta, con texto de la condesa de Castellà. Otro grupo pertenece a la colección de Canciones amatorias, para cuyos textos, en castellano, recurrió Granados a poemas clásicos y tradicionales españoles que, con alguna variante, pueden encontrarse en cancioneros originalmente publicados en el siglo XVI, como “Flores del Parnaso”, “Silva recopilada” y “Cancionero general”.
Y finalmente encontraremos amplia representación de las admiradísimas Tonadillas en estilo antiguo. La tonadilla, género histórico de la música teatral española, nació como distracción para los intermedios teatrales y, desde una simple canción (o tonada) con acompañamiento guitarrístico, fue creciendo en amplitud y medios vocales e instrumentales hasta erigirse en género de notable presencia en los espectáculos teatrales de Madrid en la segunda mitad del siglo XVIII y primeros años del XIX: la época de Goya. La tonadilla presentaba tipos populares, fundamentalmente madrileños (goyescos), y asuntos tomados de la calle y expresados en el lenguaje más llano. La música se apoyaba invariablemente en temas folclóricos o populares urbanos, y la guitarra estaba siempre presente o aludida. Seguidillas, tiranas, polos… poblaban este género que, ya avanzado el siglo XIX sería absorbido por la zarzuela. Pues bien, en su etapa final Enrique Granados produjo música vocal de concierto que recreaba el espíritu de la vieja tonadilla. Son páginas breves en las que Granados ideó simultáneamente las situaciones (incluso las letras) y la música, aunque luego los textos fueran redondeados y firmados por Fernando Periquet. La actriz Lola Membrives y el propio Granados al piano las presentaron en Madrid el 26 de mayo de 1913, causando la gratísima impresión que se mantiene hoy cuando las interpretan las grandes cantantes del momento. El hecho de que el estreno tuviera por protagonista vocal a una actriz habla a las claras de la intención teatral de estas piezas. Si en las Tonadillas de Granados predomina una expresividad castiza y graciosa, las tres Majas dolorosas se desgajan de ese ambiente para incidir en caracteres más graves y líricos.
José Luis García del Busto
Nació en Lleida, ciudad donde realizó sus estudios en piano, viola y canto. Más tarde se trasladó a la República Checa para cursar estudios superiores de canto en la Academia de artes de la Universidad de Ostrava.
Ha cantado con la Orquesta Nacional de España, Orquesta Sinfónica de Barcelona y Nacional de Catalunya, Orquesta de la Comunidad de Madrid, Filarmónica de Málaga, Sinfónica de Madrid, Sinfónica de Galicia, Nacional de El Salvador, Sinfónica Región de Murcia, entre otras, y ha trabajado con directores como Jordi Casas, Josep Vila, José Ramón Encinar, Aldo Ceccato, Leon Botstein, Michael Thomas, Case Scaglione, Kynan Jonhs, Miguel Ángel Gómez Martínez, Edmon Colomer, Carlos Kalmar, Victor Pablo Pérez, Vaclav Luks, Enrico Onoffri, Giovanni Antonini, F.M. Sardelli, Paul Goodwin, Ottavio Dantone, Richard Egarr o Rinaldo Alesandrini.
Mantiene una actividad liederística importante y junto al pianista Jorge Robaina ha ofrecido recitales en el Teatro Calderón de Valladolid, Caixaforum, Fundación Juan March de Madrid, Palacio Euskalduna de Bilbao, Auditori Enric Granados de Lleida y Palau de la Música Catalana donde recibieron un premio en el concurso El Primer Palau por la interpretación de Mahler y Dvórak. También ha cantado en el teatro de la Maestranza de Sevilla y en el teatro de Santiago de Compostela junto al pianista Rubén Fernández-Aguirre.
En el ámbito de la música antigua ha actuado en numerosos festivales europeos: Bienale de Venecia, The Bijloke (Bélgica), Festival Baroque de Sablé (Francia), Janackuv Maj (Chequia), Oslo International Church Music Festival (Noruega), Concentus Moravie (Chequia), Festival International de Musiques Sacrées de Fribourg (Suiza), Institutos Cervantes de Egipto, Siria, Jordania, Líbano, Festival de Música Antigua de La Habana (Cuba), El Salvador, Japón y también principales ciudades de Sudamérica (Chile, Uruguay y Mozarteum de Argentina y Brasil).
Con el arpista barroco Manuel Vilas ha actuado en numerosos festivales, además de grabar varios discos, como Tonos al arpa y Cantate Contarini (galardonado con el premio Prelude Classical Music en Holanda en 2010).
Entre su extensa discografía destacan, Alto cantatas de Telemann, Jephte de Carissimi, Oratorio romano de Rossi, Pegaso de Merula, las óperas Amor aumenta el valor e Iphigenia en Tracia de Nebra o Juditha Triumphans de Vivaldi.
Nació en Las Palmas de Gran Canaria, donde comenzó sus estudios musicales. A los quince años se trasladó a Viena completando su formación en el Conservatorio Estatal. Ha obtenido, entre otros, el premio “Pegasus” y la bolsa premio “Bosendorfer” en Viena, “Coleman” en Santiago de Compostela, el 2º premio de Juventudes Musicales de España y dos veces el premio al mejor pianista acompañante de la Fundación Jacinto Guerrero. En 2008 consiguió, por segunda vez, el premio al mejor pianista acompañante del concurso internacional “Acisclo Fernández Carriero” organizado por la Fundación Guerrero.
Ha actuado en los principales auditorios europeos y en el Carnegie Hall de Nueva York. Como solista ha colaborado con importantes orquestas españolas y europeas. Graba habitualmente para RNE y TVE. Realizó las primeras grabaciones mundiales del Concierto para piano de Falcón-Sanabria, de Nostálgico para piano y orquesta de Carmelo Bernaola y del Concierto para dos pianos y gran orquesta de Ángel Martín Pompey, junto a la pianista Marta Zabaleta. Obtuvo el premio de la revista Ritmo por su disco de música para piano de Guridi y el Padre Donostia. Ha grabado, entre otros, el disco diez autores diez junto a Raquel Lojendio y Alfredo García.
Es profesor de repertorio vocal en la Escuela Superior de Canto de Madrid desde 1991, e imparte regularmente clases magistrales de piano y repertorio vocal en distintos puntos de España. Colabora habitualmente con importantes cantantes, entre ellas Marta Infante.